La montaña de los Ángeles

Parece que mis recuerdos me empujan hacia Gerona, probablemente porque es mi ciudad de nacimiento o quizá porque allí es donde mi padre, Kabaleb (que también nació allí), escribió la mayor parte de su obra. Lo cierto es que para iniciar esta nueva aventura, los Ángeles han vuelto empujarme hacia Gerona, precisamente hacia la montaña de los Ángeles, un lugar mágico y maravilloso. Lo mismo debió pensar el universal pintor Salvador Dalí, que la escogió su santuario para casarse.

El santuario de la madre de Dios delos Ángeles está en el término municipal de Sant Martí Vell, a 15 kilómetros de la ciudad de Gerona. Es un lugar mágico que se encuentra 485 metros de altura sobre el nivel del mar, en un paraje idílico, rodeado de una abundante vegetación...

Cinco kilómetros antes de llegar por la carretera que sale de Gerona, encontramos a la derecha la casa de los higos. Antiguamente había sido un hostal y en el periodo de recogida de la fruta, todo el que lo deseaba, podía solicitar un plato de higos, que se servía gratuitamente. Se seguía así la costumbre de regalar fruta a los peregrinos que iban en ascensión por la montaña. Cuentan las escuelas espirituales que cuando los adeptos avanzan en el camino cada vez consumen más zumos de frutas naturales. Además la higuera es un árbol que corresponde, en el Árbol de la Vida, a Binah, el tercer Séfira y que tiene como regente a Saturno-Jehová, el jefe de los Ángeles. Hoy el antiguo hostal está en ruinas.

La bienvenida al santuario de los Ángeles nos la ofrece una destacada estatua de Cristo, forjada en hierro, conocida con el nombre de "el Cristo de la acogida", realizado por el artista Max Varés.

La historia documentada de los Ángeles empieza el año 1409, cuando ya era un lugar de peregrinación y cuando ya se le conocía por tener una energía mágica, de hecho parece ser que este santuario es una de las capillas más antiguas de Cataluña, construida por un sacerdote llegado de Jerusalén llamado Esteve. Según relatan los documentos de la época, acabada la capilla se convirtió inmediatamente en un centro de peregrinación para solicitar salud y suerte a la Virgen y para obtener remedios contra la peste y los bandoleros.

Una de las plegarias que más utilizan los peregrinos desde hace siglos es la que reza:

De de Los Ángeles madre y regente,
danos remedio a todo mal
vos que tenéis miles de ángeles
puestos a vuestro servicio habitual.

Según antigua tradición, la construcción de un templo dedicado a la Madre de Dios en los Ángeles en el año 1409 fue motivada por un hecho sobrenatural. Parece que un día en la montaña hubieron grandes lluvias y granizo. Cuando la tempestad se hubo calmado, muchas personas, todos los sábados, veían diversas luces, algunos decían que parecían ángeles, unos mayores que otros. Cuando la gente se atrevió a acercarse a la cima de la montaña encontraron, en medio de las ruinas, una capilla y una tela donde habían pintado una imagen con la madre de Dios, el niño Jesús en brazos y un ángel a cada lado. A esta tela se le llamó el trapo santo, y fue devastada por un incendio del santuario que sufrió en los inicios de la guerra civil. Actualmente el santuario está presidido por una escultura de la madre de Dios de los Ángeles esculpida en 1943. Está acompañada de cuatro ángeles y es una de las más altas que existen en España. La virgen está encima de una piedra, en la mano derecha tiene el cetro del poder y en la izquierda sostiene a su hijo, que con su mano derecha bendice y con la izquierda sostiene la bola del mundo. Encima de su cabeza podemos ver doce estrellas que representan los signos del zodíaco.

Dentro de las numerosas bodas que han tenido lugar en esta capilla mágica, en este centro de devoción, podemos destacar la del mundialmente conocido pintor Salvador Dalí, que el 8 de agosto de 1958, contrajo matrimonio con gala Elena Diakanoff, más conocida como Gala. Nuestro pintor, que llegó a la ceremonia con su famoso Cadillac negro, se procuró así la bendición de los ángeles..

Dentro del apartado de curiosidades del santuario, se explica también como políticos y militares solían subir a la montaña de los Ángeles para ser bendecidos y favorecidos por estos.

El santuario de la madre de Dios de Los Angeles dispone hoy día de grandes instalaciones para pasar el día, espacios verdes, juegos para los niños, mesas y bancos para comer, espacios para la oración y el recogimiento.

Tristán Llop, Formula un Deseo